Mi alma tiembla
Mi cuerpo entero se sacude
Trémulo, como la flama de una vela
Amenzada por la mínima brisa
Tendido en el lecho del desconsuelo
Siento el ansia de revelarme
Y luchar contra el invisible enemigo
Ese que me acosa y me inquieta
Pero estoy solo
Y caigo en cuenta de que
El enemigo no es más que la sombra
Que se cierne sobre mi mente defectuosa